✅ Estoy seguro de que el poder de Dios me protege. Agradecido, absorbo esa luz divina y dejo que brille desde mi interior. El continuo amparo de Dios es mi santuario. Me lleva a proteger mi cuerpo con buena nutrición y ejercicios. Protejo mi mente de pensamientos angustiantes me-diante la oración, la meditación y la lectura inspiracional. Con Dios estoy a salvo.
TEXTO DEVOCIONALAsí podrás andar confiado en tu camino, y nunca tus pies tropezarán.—Proverbios 3:23