✅ ¡El hombre caminó! La presencia de Cristo en mí me invita a ver más allá de la enfermedad y a acoger la energía sanadora en cada célula de mi cuerpo. Pienso y digo palabras que afirman salud. Veo mi cuerpo radiante con la vida de Dios. Digo sí a la salud y soy sanado.
TEXTO DEVOCIONALCuando Jesús lo vio acostado, y se enteró de que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: “¿Quieres ser sano?”—Juan 5:6